Y después vuelves la mirada a la izquierda y te encuentras con esto:
Por descontado que has ganado, por lo menos, un día más de existencia. Esto es a lo que yo llamo calidad de vida.
Suerte tiene el amigo que nos invitó a su casa este fin de semana.
Por cierto, como dato curioso, la iglesia conmemora a un misionero de la sierra de Huelva, matado por los comanches en Tejas, donde intentaba llevar la palabra de Dios a los apaches (¡ah, las historias!)
Cortegana. Huelva. Iglesia del Divino Salvador. Fotos: © Jesús Martín Camacho.2007.
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