Hoy, último día que los veo en clase. Joder, cuánto me han dado. ¿Cómo uno empezó en esto? ¿cómo llegó tan desecho de mundo y persona y fue sanado sin que quisiese siquiera que lo ayudasen? Éramos desconocidos y poco a poco hubo más, algún que otro consejo musical, bromas, fotos, charlas serias, confidencias. Este año la cosa ha ido a más, ¿y cómo no, si nos hemos bebido el temario de segundo de bachillerato en apenas dos meses y medio? Mucha traducción, excelentes notas y más tiempo libre... Me enorgullezco de decir que les he enseñado mucho latín y griego, pero eso se olvida; sin embargo, más honor me da que hemos aprendido juntos otras muchas más cosas. Ésas que siempre se recordarán.
Arroyo de la Miel. (c) jesús martín camacho.2009.
Por cierto, ellos son tres, pero hacen de muchos más. En ellos están también Paqui Zamudio, la risa del pimiento; Sandrita, la del mundo en los ojos; Mª del Mar, la elegancia responsable; Mayka, la sonrisa delante de la picardía; José Antonio y Carlos, la autoridad presente; Mari, la constructora de palabras; Rosita, la encantada encantadora; Carolina, las ganas contra la espalda; Melanie, la trabajadora inagotable; Amanda, la que se encontró y ha de ser amada; y muchos, tantos otros....
13 comentarios:
No one is bigger tha Jesus, except SuperJesus....you're SuperJesus; better Iesus Magister.
"Homo locum ornat, non hominem locus"
Probablemente tener el placer de haber sido tu alumno es algo de lo que se pueda alardear. Y te lo digo como casi ex alumno que soy tuyo.
Porque el reto de un profesor es enseñar algo a un alumno, y tú has sido capaz no sólo de enseñar tu asignatura, sino que has iculcado algo más en una serie de personas.
Mil millones de gracias por estos dos cursos. Y como las despedidas nunca fueron buenas, que esto sea el comienzo de otra etapa.
Y caen las lágrima, amigo. Sabes que sí que sigue otra etapa. Tu comentario no hace más que ilustrar lo que habéis sido. Un abrazo, campeón.
Hemos sido grandes, ¡grandes! Aunque más de espíritu que de altura...tú ya sabes.
Puede que, como dice esa famosa frase, a traducir se aprenda traduciendo, pero me quedo con haber compartido dos cursos con el encargado de enseñarme, además de a traducir, un millón de cosas (entre las que podemos destacar la palabra "carpetovetónico").
Un placer gigantísimo no, lo siguiente =) Me uno al gracias del mejor compañero del mundo :P =)
¿Qué habría sido de este curso sin ti, PatriLú? ¡Qué gran pareja de tres habéis sido!
¡Ay, Camaco (léase con acento de Rosarito mientras la puerta del ascensor le semifracturaba el cráneo)! ¡La materia prima! ¡Y cuánta razón tienes, ladrón! Esto te va a encantar: una mi alumna ha "tuneado" estilo cani a la Venus de Botticelli que aparece en la portada del tema 15 de su libro de Lengua castella y Literatura. Eso sí que es hacer nuestro el arte. ¡Olé por ella!
He de ver esa Venus: ¡Ésa niña merece ser arrabalizada! (léase con el tonito de "el mileniarismo va a llegaaaarl").El título de esta entrada del blog, como bien sabrá, D. Lomito, es completamente suyo. INSISTO, completamente tuyo.
Ahora leo ... y me entristece no haber pasado este curso con vosotros.. pero tendre la suerte de compartir un año mas! Realmente no creo que imagines hasta que punto me has ayudado a encontrarme... Mil veces agradecida =D
Ni tú el favor que te has hecho, preciosa Laeta!
Que el segundo sea en este mismo instituto (petición personal).
=) por supuesto !
Qué grande eres, Jesús, como profesor y como todo, quien te hubiera pillado en su momento...
Un gran abrazo!
Joan
¡No lo sabes bien, Joan! Muchísimas gracias. ¡Cuánto me hubieras enseñado con todo lo que me has enseñado y me seguirás enseñando! (en este caso la redundancia es completamente buscada ¡y justificada!).
Un abrazo, amigo.
Amigo,ahora ven lo que tanto les decía cuando llegaste que si que suerte,que eras una persona invorable...etc. Me encanta leer estos comentarios, son de verdad y de corazon,que grandes eres,cariño.
Te quiero mucho y cuidate. Inés
Muchísimas gracias, preciosa. Ellos me han dado mucho, como tú me diste, y les doy yo también algo, como sé que también a ti. Muchísimos besos. Te añoro, guapetona.
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